El japonés se caracteriza por ser el idioma principal entre las lenguas japónicas (aquellas que se considera que provienen del proto-japónico), y si bien su relación lingüística con el ainu, el coreano, las lenguas austroasiáticas, las lenguas altaicas, e incluso las lenguas drávidas ha sido muy debatida, lo cierto es que no ha sido posible llegar a un consenso acerca de su origen.
En cualquier caso, si te preguntas ¿Cuál es la historia del japonés? Lo más recomendable será que continúes leyendo, y es que en este artículo estaremos hablando sobre todo aquello que deberías conocer sobre el origen y desarrollo de este idioma, por lo que tendrás la oportunidad de dar una respuesta a tu duda, de forma sencilla y sin tener que buscar mucho más.
La aparición del japonés como lengua hablada
La lengua de Japón, igualmente conocida como “yamato”, hoy en día es hablada por alrededor de 120 millones de personas, por lo cual logra ubicarse entre los puestos número 11-13 de los idiomas más hablados a nivel global.
Se suele considerar que el japonés se trata de un idioma aglutinante y polisílabo. Ahora bien, una lengua aglutinante se caracteriza por ser esa donde los rasgos gramaticales se encuentran resaltados por la asociación de distintos elementos básicos conocidos como morfemas.
Cabe decir que no se conoce mucho sobre su origen, y aunque existen textos chinos que se remontan al siglo III en los que se registran varias palabras japonesas, lo cierto es que los primeros textos extendidos datan del siglo VIII.
Asimismo, hay que mencionar que a lo largo del período Heian, es decir entre los años 794-1185, el chino llegó a tener una gran influencia tanto sobre el vocabulario como la fonología no solo del japonés antiguo, sino también del japonés medio temprano.
Por su parte, el japonés medio tardío, el cual se remonta a los 1185-1600, destaca por acercarse bastante al japonés contemporáneo, ya que dentro de dicho período se incluyen de igual manera los primeros préstamos europeos, y después de terminar el aislamiento en el año 1853, el número de préstamos de lenguas europeas llegó a incrementarse en gran medida, sobre todo en el caso del inglés.
Historia del japonés
El origen de la lengua japonesa todavía se encuentra por ser establecido. Sin embargo, se conoce que se trató de una lengua hablada hasta el momento en que el budismo llegó a Japón desde China.
Para ese entonces, aproximadamente en el siglo VIII, los ideogramas chinos, también conocidos como Kanji, ingresaron en forma de “sutras” budistas al archipiélago Nipón.
De igual manera, vale decir que este idioma ha sido asociado con las lenguas altaicas, dentro de las que se encuentran el coreano, el manchú, el mongol, el turco y también el samoyedo, hablado en el norte de Rusia.
Otros lingüistas suelen considerar que se trata de una lengua dravídica, dentro de las que se encuentra el tamil; e incluso muchos han llegado a asociar este idioma con la lengua vasca o el euskera, que se habla al norte de España.
Como ya mencionamos, consiste en una lengua aglutinante, al igual que los idiomas malayo-polinesios y el húngaro, entre otros, por lo que crea las oraciones gramaticales a través de la unión de diversos elementos (que poseen una significación fija) dentro de una única palabra.
La primera gramática estructurada y con verdadero rigor filológico sobre la historia del japonés se trata del “Arte da lingoa de japam” de Joao Rodríguez (de origen portugués), y hoy en día continúa representando una inagotable fuente de información para los estudiosos del idioma japonés durante el período Azuchi – Momoyama, entre 1573-1615.
Actualmente, hay también 2 sistemas de romanización casi iguales los cuales son denominados Kunrei–Shiki que quiere decir “Sistema oficial” y Nippón–Shiki que se traduciría como “Sistema japonés”; sin embargo, se encuentran pensados para japoneses, lo que significa que no son posibles para lectores foráneos.
Además, es apropiado mencionar que dentro del japonés no hay alfabeto, pero existen 2 silabarios y también miles de kanji (idiogramas), que quiere decir literalmente “letra china”.
En este sentido conviene señalar que los silabarios consisten en “Hiragana” creado por Kooboo Daishi, un famoso monje budista, y “Katakana” elaborado en el siglo VIII.
En cualquier caso, la cantidad de ideogramas básicos determinados a través del Ministerio de educación de Japón durante el año 1980, se trata exactamente de 1945 kanjis; por lo que su estudio exige mucha paciencia y gran esfuerzo.
Lenguaje, gramática y escritura de Japón
El sistema escrito de la lengua japonesa está compuesto por tres grupos de caracteres, los cuales consisten en el Kanji (con miles de caracteres del idioma chino), el Katakana (con 2 conjuntos formados por 46 caracteres), y el Hiragana.
Por su parte, es posible escribir los textos no solo con un estilo occidental a través de filas horizontales que van de arriba abajo, sino también con el estilo tradicional de columnas verticales que van desde la derecha hasta la izquierda.
Hoy en día, estos dos estilos coexisten perfectamente, por lo que suele ser común conseguirlos dentro de la vida diaria de los japoneses.
En el caso de la gramática se puede decir que la misma resulta sencilla, debido a que no hay elementos característicos de género y/o de número; además, los sustantivos siempre se muestran del mismo modo y las conjugaciones verbales, al igual que los adjetivos, resultan simples y estándares, casi sin excepciones.